Septiembre será recordado como el mes en que la Reserva Federal inició su ciclo de flexibilización monetaria, reduciendo la tasa de referencia en 50 puntos básicos. Esta medida busca equilibrar los riesgos en su doble mandato de mantener la inflación baja y el pleno empleo. La decisión se toma en un contexto donde el mercado laboral dio ciertos signos de debilidad, acompañado de una inflación en clara tendencia a la baja. El mercado anticipa más recortes este año, siendo las primeras reacciones positivas, con subas tanto en bonos como acciones durante el último mes.
La tasa a 10 años que al inicio de septiembre situaba en torno a 3,90% bajó 10 puntos básicos para culminar en 3,80%. En general, la renta fija se vio beneficiada con los bonos del Tesoro de duración media rindiendo 1,38% en el mes, la renta fija corporativa grado de inversión un 1,96% y los bonos de alto rendimiento un 1,70%. En lo que va del 2024, estos activos tuvieron un rendimiento del 4,16%, 5,14% y 8,09% respectivamente.
Las acciones del mercado americano también celebraron la decisión de la Reserva Federal. El S&P500 subió 2,14% mientras que las tecnológicas registraron un rendimiento similar, con una suba del 2,57%. El Dow Jones, un índice más conservador debido a su mayor exposición industrial, también subió un 1,96%. En lo que va de 2024, las acciones han ofrecido retornos muy atractivos del 22,08%, 19,97% y 13,93%, respectivamente.
En Europa, las acciones se contagiaron del buen humor de los mercados estadounidenses y se vieron impulsadas un 1,82% en el mes. En la misma línea, el Banco Central Europeo también decidió bajar las tasas de referencia durante septiembre, aunque este fue su segundo recorte de 25 puntos básicos hacia 3,50%. Christine Largarde, presidente de esta entidad, afirmó que las condiciones actuales de inflación y el estado de la economía permiten continuar con la reducción de las tasas de interés, señalando que las decisiones se tomarán reunión a reunión.
Otra de las grandes novedades del mes, se dio en China que ha implementado un fuerte estímulo monetario para intentar revertir la desaceleración de su economía, vía baja de encajes, reducciones de tasa de interés interbancaria, y creación de fondos de recompra de acciones. Además, se flexibilizaron las condiciones hipotecarias, reduciendo el pago inicial para la compra de segundas viviendas, y se destinaran fondos para que agencias estatales compren inventarios no vendidos a promotores inmobiliarios. Este estímulo llega en un contexto en el que la economía china se ha desacelerado más de lo esperado, con expectativas de crecimiento por debajo del 5% anual. Las primeras reacciones de los mercados fueron muy positivas, con el índice iShares China Large-Cap ETF (FXI) subiendo alrededor de un 20% en solo 10 días, la mayor suba semanal desde 2008.
En este contexto, los mercados emergentes también mostraron sólidos rendimientos en el mes, con un aumento del 5,95% en acciones y del 2,02% en bonos.
Septiembre 2024 en los mercados globales
La economía estadounidense se está normalizando y seguiría presentando buenos fundamentos
Desde su informe semanal, la casa de inversión se refiere a la economía estadounidense, describiéndola bajo un proceso de normalización aunque con una disminución en la confianza del consumidor que, por el momento, no alcanza niveles preocupantes. Este retroceso en la confianza se atribuye al último recorte de tasas de la Reserva Federal mayor de lo esperado, lo que podría interpretarse como un intento de acelerar medidas ante un posible deterioro de la economía más rápido de lo previsto. No obstante, desde Invesco afirman que la economía de Estados Unidos sigue en buen estado, a pesar de los últimos resquemores presentados por los consumidores.
Una situación similar ocurre en el Reino Unido, donde los consumidores también se muestran pesimistas sobre el futuro de la economía. Al igual que en Estados Unidos, Invesco destaca que los índices PMI siguen en territorio de expansión, a pesar de este pesimismo generalizado.
Por último, resaltan que las recientes medidas tomadas por China fueron bien recibidas por el mercado, continuando las acciones asiáticas con atractivas valoraciones. No obstante, advierten que aún es temprano para determinar si estas medidas tendrán un impacto positivo en la actividad económica, aunque los primeros resultados en los mercados han sido alentadores.
